Los aromas llegan a nuestra nariz y van directamente a las partes más primitivas del cerebro, con lo que afectan nuestras emociones y el sistema nervioso antes de que nuestra corteza cerebral superior adquiera siquiera conciencia de ellos.
Los olores familiares, tales como el café de la mañana, un pastel de chocolate en el horno o las fundas de las almohadas con olor a lavanda, son todos reconfortantes y calmantes.
Las tiendas minoristas usan el aroma para seducir a los compradores para que se sientan cómodos y enriquecer su experiencia.
Los olores fuertes de los desinfectantes de hospital pueden evocar miedo.
La industria de perfumes invierte millones de dólares en diseñar nuevas combinaciones de fragancias atrayentes.
Muchos terapeutas masajistas incluyen aceites esenciales en sus cremas de masaje para combinar los beneficios de la aromaterapia y el masaje.
Los hospitales, hogares de ancianos y clínicas alrededor del mundo están empezando a usar aromas para ayudar a los pacientes a sentirse más relajados, alegres y a gusto.
Los aceites esenciales de lavanda, el amaro, el nerolí y la manzanilla son relajantes, por lo que reducen la agitación y el estrés y promueven la calma.
Los aceites de plantas cítricas, pino, eucalipto, cedro y menta promueven el enfoque y la sensación de sentirse refrescado.
Tenga presente cuando compre productos de limpieza para el hogar, jabones, productos de higiene personal y aromatizadores que algunos de estos productos contienen fragancias naturales de los aceites esenciales de plantas, mientras que otros están basados en impostores químicos nuevos para la naturaleza que pueden desencadenar reacciones desagradables.
Para las personas que son extremadamente sensibles a los olores químicos, estos olores desencadenan dolores de cabeza, depresión, ansiedad, cambios de humor, irritabilidad, fatiga y una variedad de síntomas desagradables. El nombre médico para esto es sensibilidad química múltiple (SQM); las personas con esta sensibilidad pueden experimentar ataques de pánico completos, confusión o depresión profunda cuando se exponen a productos químicos a los cuales son sensibles.
Siempre que sea posible, use limpiadores naturales, biodegradables y libres de fenoles, fosfatos, amoníaco y soda cáustica
Desde hace mucho tiempo, se descubrió que los aromas de los espacios tienen la capacidad de cambiar el estado de ánimo de quienes lo disfrutan y pueden llegar a provocar sensaciones alegres, agradables, de confort y hasta nostálgicas, pues, al ser detectados por nuestro cerebro, este produce reacciones fisiológicas, aunque sea de forma inconsciente.
En esta época actual en la que vivimos, es sumamente importante hacer que nuestros ambientes donde pasamos la mayor parte de nuestro tiempo sean agradables. Es por esta razón, que el uso de aromatizadores o difusores de aromas se ha vuelto muy importante, ya que permite que nos sintamos a gusto.
Hoy hay varias empresas a nivel mundial que ofrecen productos sustentables y amigables con el medio ambiente y que pueden ofrecer distintas soluciones si sos de esas personas que buscan marcar la diferencia, cuidando nuestro entorno y lo que hacemos como seres cada vez más conscientes de como nuestras acciones influyen en el planeta.
Recomendamos que según el país que vivas, busques empresas que te puedan ofrecerte productos de calidad, que usen fragancias naturales, y no contaminantes. Desde nuestro punto de vista recomendamos buscar empresas nacionales de ser posible ya que de esa manera ayudarás a la economía de tu país y comunidad. Creemos firmemente que esa, es tambíen una forma de sustentabilidad.
Agradecemos a Bienestar Productos Sustentables por la realización de esta nota.
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